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Por orden del Sr. Hno. Mayor y de conformidad con los Estatutos de la Cofradía, el pasado 4 de febrero tuvo lugar la Asamblea General Ordinaria de cofrades en el salón de actos del Seminario Diocesano, con el siguiente orden del día.

  • Lectura y aprobación, si procede, del borrador del acta de la Asamblea General de 2017.
  • Lectura de la Memoria del ejercicio 2017.
  • Aprobación, si procede, de la modificación y adaptación de los Estatutos[1] al Estatuto Marco para las Cofradías y Hermandades de la Diócesis de Jaén.
  • Aprobación, si procede, de la modificación del Protocolo de Promitentes.
  • Informe y propuestas del Hno. Mayor.
  • Ruegos y preguntas.
  • Aprobación, si procede, del Estado de Cuentas de 2017 y Presupuestos para 2018.

 

Tanto el acta correspondiente al Asamblea General Ordinaria de Cofrades correspondiente al 2017, así Estado de cuentas corresponde al 2017 fue presentado a la asamblea tanto los ingresos y como gastos que había tenido nuestra Cofradía correspondiente al año 2017, fueron aprobados por unanimidad. Al igual que los presupuestos para el 2018 que fueron presentados.

Tras la exposición de la propuesta para modificar y adaptar nuestros estatutos al estatuto marco de cofradías y hermandades  con varias intervenciones de los cofrades asistentes, fue sometida a la consideración de la asamblea, siendo aprobada dicha modificación.

 

En lo que respecta la modificación del Protocolo de Promitentes, intervino en este punto el responsable de la Sección de Promitentes, el cual hizo una exposición de los cambios que se proponían a consideración, al finalizar su intervención y tras varias intervenciones de cofrades se sometió a consideración de la asamblea, siendo aprobada la modificación propuesta.

En lo que respecta al informe y propuestas del Hermano Mayor, se informó  a los presentes:

En primer lugar informó de la sustitución del alumbrado externo del Santuario que recientemente acometió nuestra cofradía, siendo reemplazados los focos por unos de leds de tonos cálidos.

La restauración que se ha realizado el Pendón de la cofradía, sustituyendo la estructura interior de hierro por una de aluminio, con el fin de rebajar significativamente su peso.

La realización de dos parihuelas que se estaban realizando para el paso de Santa Marcela y María Santísima de los Dolores y que será estrenada en la Madrugada de este año.

Informó también de la realización de una nueva saya de procesión para la imagen de Santa Marcela que se está realizando en los talleres de Javier Garcia y Martín Suarez y que será estrenada en la Madrugada de 2018

Este año en la Madrugada otra cofradía procesionará en nuestra ciudad Cofradía del Gran Poder y que pasará por el itinerario oficial antes que la nuestra. Esta cofradía ha solicitado los romanos por lo que los mismos acompañaran a esta cofradía este año, y el próximo lo harán con la nuestra.

Por último explicó que este años los cirios de cofrades se entregarán en el Santuario al iniciar la procesión, o en otro punto alternativo que este año será en la casa hermandad de la Cofradía de la Virgen de la Capilla, y que se ha establecido un horario de 6,45 a 7,30 para recoger el mismo. Explicó que los hermanos de luz son todo los cofrades que salen en la procesión alumbrando a nuestras Sagradas Imágenes y vistiendo correctamente el traje de nazareno.

Así concluyó el informe.

Reproducimos a continuación la lectura de la Memoria correspondiente al año 2017, realizada por nuestro cronista D. Javier Cano.

 

MEMORIA DEL EJERCICIO 2017

 

Dando cumplimiento al precepto estatutario recogido desde antaño en los usos y las costumbres de esta antigua, insigne y real cofradía se plasman en esta memoria los acontecimientos más relevantes vividos desde la celebración de la anterior asamblea general, el pasado 5 de febrero de 2017, hasta la presente.

 

Como ya es tradición, los cultos dedicados a nuestros sagrados titulares constituyeron uno de los pilares del calendario cofrade. Devoción a raudales destiló el piadoso besapié a Nuestro Padre Jesús, que, un año más, atrajo hasta el Camarín a miles de personas. Entre el 16 y el 19 de marzo, las colas de fieles ansiosos de ungir sus labios con el dulce tacto del Señor de Jaén poblaron la Carrera que lleva su nombre, donde la emoción volvió a ser el común denominador de las cuatro jornadas desde la apertura del santuario hasta su cierre; a este respecto cabe destacar la sensibilidad de la hermandad con el pueblo jiennense y con los miles de devotos que se desplazaron desde puntos dispares de la provincia, de Andalucía y del resto de España, al ampliar hasta las diez de la noche el horario del tercer día de besapié.

 

 

Especial mención merece la solemne novena dedicada al Nazareno y a su bendita Madre, la Santísima Virgen de los Dolores, entre los días 24 de marzo y 1 de abril, predicada por el padre Julio Millán Medina, presidente de la ONG Mensajeros por la Paz. Ante nuestros sagrados titulares, hermosamente ubicados, con el flamante telón de fondo de los nuevos reposteros que desde el 17 de marzo cuelgan en el ábside del templo —obra del taller huelmense de bordados de Juana Navarro— y rodeados de belleza floral en el presbiterio de la antigua iglesia carmelitana de San José —soberbio trabajo tanto de Fabricanía como del cuerpo de Camareras y que merece mención en esta cita anual—, las distintas vocalías y secciones de nuestra hermandad participaron activamente en el desarrollo de tan arraigada celebración religiosa, en la que estuvimos arropados con la compañía de las cofradías de Pasión y Gloria de la ciudad y de un sinnúmero de fieles, entre ellos los ancianos que participaron en la segunda edición de la “Semana del abuelo”, organizada por Teletaxi Jaén y que contó con nuestra entusiasta colaboración; bajo la antigua cruz rematada en plata que preside las alturas del Camarín, residentes de distintos centros de mayores de la provincia rezaron, se emocionaron y pidieron por los suyos y por sí mismos sobrecogidos por la contagiosa emoción de encontrarse a apenas unos centímetros de Jesús de los Descalzos y su bendita Madre. Por su parte, el cuarteto Xauen Lírica, como en ediciones precedentes, ilustró musicalmente y engrandeció el novenario con la calidad de sus interpretaciones. En el transcurso de los cultos, concretamente los días 25 y 31 de marzo, los cofrades que obtuvieron el rango de pleno derecho recibieron su correspondiente medalla y patente personalizada. Dentro de este marco se celebró también el acto de jubilación de promitentes con el que la cofradía, como es tradición, rinde público homenaje y muestra su gratitud a quienes han cargado sobre sus hombros las sagradas imágenes titulares de la cofradía y que al cumplir la edad reglamentaria de cuarenta y cinco años o haberlo hecho durante veinte, en el caso de promitentes de Nuestro Padre Jesús Nazareno, lo portan por última vez el Viernes Santo siguiente. Familiares y amigos de los destinatarios de tan entrañable reconocimiento (veintidós del trono de Jesús y tres de Santa Marcela) los arroparon durante la eucaristía previa, a cargo del capellán de la hermandad. Reseñable resulta también el sentido homenaje que la cofradía tributó a don Francisco García Ortiz el séptimo de los nueve días dedicados a Nuestro Padre Jesús y Nuestra Señora de los Dolores, cuando el ilustre e histórico cofrade nazareno recibió el aprecio y el afecto de su hermandad, materializados en una réplica de las llaves que porta en su brazo izquierdo la bendita imagen.

Como cada año, la Virgen de los Dolores fue expuesta en piadoso besamanos, en esta ocasión los días 21 y 22 de marzo. Precisamente la segunda y última jornada le fue presentado un grupo de niños menores de veinticuatro meses, que gozaron el privilegio de su cercanía, sobrecogedor instante que la cofradía perpetuó con la entrega de estampas personalizadas a los protagonistas. De nuevo, las sensibles palabras de nuestro capellán pusieron la más acertada banda sonora a tan entrañable iniciativa.

 

 

Uno de los momentos cumbres de la devoción nazarena y mariana se vivió con la multitudinaria procesión, el Viernes Santo 14 de marzo. Alfombrados los pies de nuestros titulares con las flores ofrecidas durante la mañana del día del amor fraterno por ciudadanos, cofradías y otros colectivos y cuando todavía flotaban en el aire los ecos de la ofrenda poética, en la voz del cronista de la cofradía, acompañado del guitarrista jiennense don Luis Delgado Gregorio, puntualmente, a las tres de la madrugada, el hermano mayor dio el primer golpe de llamador al paso de Santa Marcela, y minutos más tarde comenzaba a caminar Nuestro Padre Jesús a hombros de sus promitentes, sembrando de emoción y belleza la noche más grande de Jaén. Los pasos portaron un crespón en señal de luto por la muerte, el mes de junio de 2016, de nuestra querida camarera Dolores Torres Almazán, a quien mañana lunes día 5, a las cinco y media de la tarde, se le tributará homenaje municipal con el descubrimiento de la placa con la que se le dedica la calle Camarín de Jesús. Por su parte, las primeras mecidas del paso de palio empezaron a la hora prevista, poco después de que partiese el Discípulo Amado. La salida de la Señora reveló, también, una de las más celebradas novedades de la procesión: a falta de multitudes a las puertas del santuario para recibirla, cuatrocientas oraciones escritas sobre la cera de unos mínimos pero constantes cirios la arroparon nada más tocar calle, lo que dio lugar a una intimísima y singular estampa de recogido fervor que certificó lo acertado de tan piadosa iniciativa. Otra vez, nuestra comitiva penitencial hizo de Jaén un derroche de devoción al paso del cortejo por el casco antiguo, durante el Encuentro, que resultó especialmente brillante, y en todos y cada uno de los puntos de su itinerario, recibiendo continuas ofrendas de particulares y cofradías hermanas. Se vivieron, como desde siglos atrás, instantes inenarrables, que darían para una crónica tan extensa que haría falta toda una asamblea general de cofrades para darle lectura. Sin embargo, por su trascendencia sentimental, recogen estas páginas un episodio de esos que calan la tela de la túnica, por muy ruda que esta sea, atraviesa la piel y entra de lleno en las honduras del alma: ocurrió en la calle Maestra, a las puertas de nuestra sede social. Allí, Samuel, Fran y Víctor, tres pequeños grandes luchadores, tres cotidianos ejemplos de valentía y de esperanza, emocionados, felices a pesar de los pesares, tras protagonizar una emocionantísima “petalada” desde los balcones de nuestra casa de hermandad, que este año se hermoseó con sendos retratos de Jesús y María, dieron los golpes de llamador para izar el trono del Todopoderoso Nazareno y sacaron lo mejor de sus fuerzas para gozar el privilegio merecido de botar el dorado galeón con el que anduvo sobre las aguas surca el mar de olivos. También allí se le rindió sentido homenaje y recuerdo a la fallecida cantaora Rosario López, que tantas procesiones de la Madrugada engrandeció con su reconocido arte. Toda la noche y la mañana del Viernes Santo, la ciudad se transformó en un escenario a cielo abierto que, desde distintos balcones, ofrendó saetas al Señor y a su Madre, gracias al “Itinerario saetero” promovido por nuestra cofradía en el que las gargantas poderosas y sensibles de José Gersol, “Niño de Cabra”; Mari Carmen Gersol, Mari Carmen Mesa y Rafael Maeras rezaron, de la manera más jonda, al anónimo Rey de Jaén y a la insuperable Dolorosa de José de Medina. Una vez en la carrera oficial, la Hermandad Sacramental de la Santa Cena fue la encargada de recibir a la comitiva. La oscuridad de la noche impidió distinguir con claridad lo que, al amanecer, fue una acertadísima y novedosa evidencia: el cirio procesional que portaron los hermanos de luz, en esta ocasión por vez primera y que permitió a los cuerpos de orden identificar a nuestros cofrades en las filas nazarenas y a estos, ocupar los tramos del cortejo reservados para ellos. Una iniciativa en pro de la dignificación de nuestra comitiva que, a buen seguro, arraigará y hará de la manifestación pública de fe más multitudinaria de la ciudad, también una de las mejor organizadas. También la luz del día permitió admirar la nueva cruz de plata del servicio de paso, realizada en los talleres de don Antonio Cuenca de Lucena, en la provincia de Córdoba. Y tras la larga procesión acompañados de autoridades, cofrades y pueblo, horas plenas de momentos irrepetibles que harían interminable esta memoria, ya con la tarde cernida sobre los cantones, el manto de Nuestra Señora de los Dolores ponía el más hermoso epílogo a otro histórico Viernes Santo. Los claveles de Jesús y las flores de la Virgen, un año más repartidas por el diligente grupo de cofrades encargados de tan entrañable iniciativa, acariciaron el alma de enfermos y ancianos, así como de cuantos quisieron acercarse, ya el Sábado Santo, al Camarín, a recoger la preciada reliquia pasionista.

 

La celebración de la santa misa, el 24 de marzo, en el santuario de Nuestro Padre Jesús, puso fin a un curso cofrade pleno de ilusión, el primero del gobierno de nuestro actual hermano mayor, don Ricardo Cobo.

El 15 de julio, en pleno periodo estival, la efeméride de la llegada de la imagen de la Virgen del Carmen desde el convento de las madres carmelitas hasta nuestra iglesia justificó la celebración de una misa, oficiada por el padre Julio Millán.

 

Del 13 al 15 de septiembre, la Señora capitalizó un triduo en su honor que contó con don Francisco Manuel Filgueira Sánchez, vicario parroquial de Cristo Rey, como oficiante. Fueron tres jornadas brillantes, ilustradas musicalmente por la soprano Marta Alba, en las que quedó patente cómo la devoción hacia la Santísima Virgen de los Dolores madura y se acrecienta año tras año.

 

 

Los bancos de la antigua iglesia carmelitana acogieron diariamente, cada domingo y fiestas de precepto, a aquellos que optaron por recibir la comunión en el histórico y felizmente recuperado recinto sacro frente al no menos legendario “cantón de los civiles”. Llegado noviembre, las festividades de Todos los Santos y los Fieles Difuntos nos hicieron recordar a los ausentes, a quienes gozan ya de la Madrugada eterna, esa que no conoce horas de salida ni encierro, la que discurre sin prisa, alumbrada por la luz inacabable de esa delicadísima candelería que es la mirada de Dios. Las celebraciones litúrgicas se celebraron por nuestros cofrades fallecidos, cuya apreciadísima memoria enfatizamos y resumimos en las significativas pérdidas de nuestros hermanos don Juan de Dios Rodríguez Martínez, tras dieciséis años de pertenencia a la hermandad, conocido como “el abuelito” por todos nosotros y por los asiduos a la casa de Jesús, que los últimos años de su vida se convirtió en su celoso cuidador y, desde el gozoso traslado desde la Catedral, allá por noviembre de 2009, en activo y constante mantenedor de la capilla fundada por la familia Frías y de todo lo que tuviera que ver con la cotidianidad de nuestras imágenes titulares; nos dejó también el que fuera miembro de anteriores juntas de gobierno don Cristóbal Sánchez Llavero, tras cincuenta y ocho años inscrito en el nomenclátor nazareno, de los cuales ocupó cargo en la junta de gobierno entre 1988 y 1993, y cuando el año entraba en sus últimos días, el tan entrañable como respetado don Juan Delgado Mena, fabricano mayor entre 1971 y 1993, con sesenta y nueve años como miembro de la cofradía y dignísimo heredero y transmisor de la dinastía nazarena de los herreros de la calle San Clemente: por todos ellos elevamos nuestras oraciones en la certeza de que participan ya en la inacabable procesión gloriosa que discurre por itinerarios de Cielo. El día 18 de ese mismo mes de noviembre, festividad de Santa Cecilia, el Camarín embelleció la liturgia eucarística, en honor de la patrona de los músicos, con la participación de la Orquesta Sinfónica Ciudad de Jaén y el día 25, en coincidencia con la onomástica de la copatrona de Jaén, dimos gracias, un año más y ya van ocho, por el inolvidable traslado de nuestras sagradas imágenes titulares desde el templo mayor de la diócesis hasta nuestra querida casa carmelitana, eucaristía que contó con las maravillosas voces blancas de la Escolanía catedralicia.

 

Llegó diciembre y, con él, festejamos la Inmaculada Concepción de Nuestra Señora en torno al altar; ya en plenas celebraciones navideñas, la mañana del día 25 nos unimos en comunión, una vez más, en el santuario, llenos de una alegría que el Coro Amigos del Rocío de nuestra capital hermoseó con sus cantos.

 

Dos jornadas después, San Juan, el discípulo amado, se erigió en protagonista de nuestra devoción. Con motivo de su festividad acudimos a la eucaristía celebrada en su honor, en la que, como en ocasiones precedentes, los grupos joven e infantil de la cofradía brillaron en el desarrollo de la liturgia en torno a su patrón. Gozosa jornada que disfrutamos doblemente, al contar con la presencia de la asociación Pídeme la Luna, que agrupa a personal sanitario y familiares de niños pacientes de onco-hematología. Con ellos rubricamos una vinculación cada día más estrecha, que se materializó en tan emotiva celebración y que tuvo a bien distinguirnos con el nombramiento de socios de honor. Dentro ya del nuevo año 2018, el pasado 18 de enero, el excelentísimo y reverendísimo señor obispo de la diócesis, don Amadeo Rodríguez Magro, presidió una eucaristía dominical plena de momentos para el recuerdo; una fecha de esas que brillan con luz propia en nuestro singular calendario perpetuo pues, por vez primera, entre los muros de la antigua iglesia conventual de San José sonó la marcha que, allá por 1935, estrenara el maestro Emilio Cebrián para Nuestro Padre Jesús, con la particularidad de hacerlo en modo polifónico, en las voces de primer nivel del Orfeón Santo Reino, y con la letra que, en la última década del siglo XX, compuso el gran poeta jiennense Felipe Molina Verdejo.

 

 

Finalmente, el pasado domingo 28 de enero, Santa Marcela se convirtió en protagonista de la misa dominical, que celebramos en su honor. En fecha tan señalada, cinco promitentes de la Verónica recibieron los preceptivos diplomas que certifican un lustro de labor bajo el paso de la piadosa mujer que limpió el rostro de Jesús.

El que fuera templo del desaparecido convento carmelitano se erigió en punto de destino de todos aquellos que deseaban evidenciar su querencia hacia la legendaria imagen. Numerosos fueron los colectivos que, a sus pies, lo veneraron a lo largo del año; allá por el mes de marzo, el director de Diario JAÉN, don Juan Espejo González, rubricó con nuestro hermano mayor el nuevo acuerdo de colaboración entre la cofradía y el periódico provincial, ante la presencia notarial de nuestros sagrados titulares; se recibió corporativamente a la Antigua y Real Cofradía de la Virgen de la Cabeza, a cuya titular se le hizo una ofrenda de flores a su paso en procesión. Visitaron el santuario las hermandades de Jaén y Colomera para rendir homenaje y despedirse de Jesús y Nuestra Señora de los Dolores antes de peregrinar al cerro del Cabezo. También los rocieros jiennenses rezaron y ofrendaron flores a nuestros queridos titulares; en correspondencia, esta antigua, insigne y real cofradía entregó a los devotos de la Blanca Paloma claveles y las velas del paso de palio, para alumbrar su simpecado. El mes de las flores nos trajo, desde los pagos de la Fuente de la Peña, a la Cofradía del Santísimo Cristo de Charcales, que depositó una ofrenda floral ante Jesús, y meses después, poco antes de comenzar su temporada, el Jaén Fútbol Sala volvió a postrarse en el Camarín para pedir por la inminente temporada deportiva. El santuario formó parte del repertorio monumental incluido en la tercera Noche Jahenciana, que permitió a una multitud de jiennenses conocer los detalles históricos y artísticos del templo. Una vez más, el equipo de restauradores formado por don Raimundo Cruz Solís, doña Isabel Poza Villacañas y don Joaquín Cruz Poza pobló el aire del Camarín de aromas de pintura y ruido de pinceles para chequear a nuestros sagrados titulares; el diagnóstico de tan prestigioso trío de técnicos arrojó tranquilidad, al calificar positivamente el estado de las tallas, sobre las que el besapié y el besamanos, principalmente, volvieron a dejar cicatrices que fueron restañadas con la profesionalidad que caracteriza a los citados restauradores. En octubre recibimos a la Cofradía de la Verónica del municipio almeriense de Berja y, por último, en la fiesta de la Epifanía, unos más que “familiares” Reyes Magos de Oriente se postraron ante el Niño Jesús para, posteriormente, partir desde el santuario a repartir alegría entre nuestras queridas madres del convento carmelita de Santa Teresa y en la Residencia de Mayores Condes de Corbull.  

Si intensa fue la actividad en el templo carmelitano, nuestra hermandad se hizo presente ante diferentes altares e instituciones de la ciudad y la provincia; de esta manera, a las preceptivas entrevistas con las máximas autoridades municipales, eclesiásticas, militares y policiales se unieron, entre otras, las visitas a nuestras queridas madres del convento de Santa Teresa, cuyo vínculo cultivamos como muestra de fidelidad a nuestros orígenes carmelitanos; nuestro activo e incansable Grupo Joven viajó hasta Sevilla, en el mes de febrero, para conocer más detalles sobre su influyente Semana Santa; una representación de la cofradía se trasladó hasta la pedanía marteña de Monte Lope Álvarez en diversas ocasiones a lo largo de 2017, una de ellas, allá por el mes de marzo, con motivo de la celebración anual de la asamblea de la Asociación Beato Manuel Aranda, de la que es motor y entusiasta impulsor, como es sabido, nuestro querido capellán, don Antonio Aranda; mostramos nuestra solidaridad al participar en la cena gala benéfica a favor de los refugiados iraquíes en Jordania, que contó como anfitriones con el padre Ángel y nuestro predicador de la novena de este año, don Julio Millán Medina; tomamos parte, además, en citas de tanta trascendencia para la vida cofrade jiennense como el V Certamen de Camareras de Pasión —cuya organización recae, en 2018, en nuestra hermandad—, el II Encuentro de Mujeres Promitentes y Costaleras, que entre otras actividades tuvo en nuestra vice hermana mayor, doña Rosa Garrido Cancio, a una de las grandes protagonistas, a través de la conferencia ofrecida en torno a la figura femenina en la vida pasionista de Jaén; este encuentro, que comenzó con misa en el Camarín y posterior confraternización en las instalaciones vecinas del colegio de Santo Tomás, resultó de lo más brillante, además de por el interés de sus contenidos, gracias a la ilustración musical de la Agrupación Maestro Miguel de Villargordo, que realzó con sus interpretaciones una convocatoria cada día más afianzada, cuya ejemplar organización a cargo del área de Gestión de Promitentes, capitaneada por nuestro hermano don Juan de Mata Pacios, es digna de encomio; convivimos con nuestros colectivos hermanos del Viernes Santo en la cita anual en la que unimos lazos e intercambiamos impresiones y proyectos ilusionantes y, en pro de la divulgación de los valores espirituales y patrimoniales de nuestra cuatro veces centenaria hermandad, tomamos parte en dos exposiciones temáticas de gran calado: “La túnica sagrada: tres siglos de bordados en la vestimenta de Jesús Nazareno en Andalucía”, que tuvo lugar, en el mes de octubre, en el Real Convento de Santo Domingo de Granada, donde, junto con otras veintisiete indumentarias, se pudo admirar una de las túnicas de Nuestro Padre, la decimonónica conocida como “la Rica”; y en “La Rosa de Oro”, segundo salón cofrade jiennense, celebrado en la Institución Ferial el pasado noviembre.  

 

Especialmente jubiloso resultó la presencia de esta insigne corporación pasionista en el municipio madrileño de Collado-Villalba, adonde, en el mes de marzo, nuestra vice hermana mayor viajó para traer hasta las vitrinas de nuestra casa de hermandad una importantísima distinción, la medalla Víctimas del terrorismo, concedida dentro del marco de la gala homenaje a los afectados por tan terrible lacra; el premio le fue otorgado a esta antigua, insigne y real cofradía en atención a “su trayectoria social y promoción de los valores humanos”. Sin salir de nuestra provincia, también la Asociación de Amigos de las Catedrales de Jaén y Baeza tuvo a bien recompensar nuestros esfuerzos con una mención en reconocimiento al altar instalado en la calle Campanas durante las celebraciones del Corpus Christi.

En el capítulo de actos enmarcados en el tiempo de preparación para la Pasión, Muerte y Resurrección de Cristo, celebramos dos citas de elevada trascendencia en la agenda de actos de la cofradía; de un lado, la presentación del boletín “Jesús Nazareno”, que en 2017 alcanzó su trigésimo sexta edición y que se encargó de desgranar con detalle el 4 de marzo, en los salones de la Real Sociedad Económica de Amigos del País, nuestra archivera, doña Amparo López Arandia. Dentro de la misma convocatoria se hizo público también el cartel Madrugada, basado en una singularísima fotografía original de don José Pegalajar, que ofrecía el paso de Nuestro Padre Jesús, inmerso en las sombras de la noche y rodeado de flashes que lo inmortalizaban. De otra parte, sobre el escenario del teatro municipal Darymelia, el periodista y cofrade don Manuel Contreras Pamos pronunció, una semana después, el XVIII pregón Madrugada. El orador compartió con los asistentes su probada devoción al Señor de los Señores de Jaén a través de sentidas palabras que emocionaron a un público cuyos oídos deleitaron también la música de la Banda Sinfónica Ciudad de Jaén y la voz jonda de la cantaora Mari Carmen Gersol, quien sobrecogió con una emotiva saeta.

La caridad y la solidaridad volvieron a ser dos de los presupuestos principales del ejercicio. De esta manera, el 10 de marzo la cofradía respondió generosamente a la convocatoria de donación de sangre celebrada en las dependencias de Vocalías. Diferentes operaciones de recogidas de alimentos, en los meses de septiembre y noviembre, en las que se implicaron junta de gobierno, secciones, camareras, promitentes y cofrades en general y promovidas por la vocalía de Caridad, bajo la dirección de doña Maribel Pérez, dieron estupendos resultados que contribuyeron a aliviar las necesidades más perentorias de los menos favorecidos. En esta línea, renovamos nuestra colaboración con el colectivo Jaén solidario, para ayudar con alimentos a familias necesitadas cuya situación se ve agravada por las carencias que sufren niños y ancianos de esos hogares; por su parte, la vocalía de Juventud, que coordina don Tomás Arias, entregó al Comedor de San Roque los doscientos trece litros de leche recogidos por los niños de nuestra cofradía que participaron en las procesiones de las Cruz de Mayo; Manos Unidas recibió un donativo de la hermandad con destino a las necesidades existentes en Mauritania, y nuestra querida asociación Pídeme la Luna fue la beneficiaria de cuatrocientos veinte euros equivalentes al peso de los productos alimentarios recogidos por la cofradía durante el partido que, el 18 de noviembre, disputó el Jaén Fútbol Sala en el pabellón de la Salobreja. La presencia de nuestro hermano mayor en Haití llevó la caridad de nuestra cofradía hasta aquellas necesitadas tierras. Igualmente, hace escasos días, el padre Julio Millán y su colaboradora en Mensajeros por la Paz Sonia Balarezo recogieron la aportación de esta antigua, insigne y real cofradía que servirá para sufragar los desayunos de unos doscientos escolares en territorio haitiano.

 

 

Hablando de donaciones, y fuera ya del ámbito caritativo, por lo simpático de su naturaleza debe quedar constancia en estas páginas de la realizada por don Rafael Hernández, ceramista e industrial del Mercado de Abastos de San Francisco, que allá por el mes de abril regaló un nutrido lote de jarras de aguador, rotuladas según el tramo para el que fueron concebidas, con el deseo de que alivien la sed de los promitentes durante la procesión, un destino difícilmente asumible, por motivos prácticos, pero que no menoscaba la gratitud que merece su generoso y entrañable gesto. En septiembre registramos la donación de cuatro marchas procesionales dedicadas a Nuestro Padre Jesús, así como una propuesta de letra para la que, en 1935, compusiera don Emilio Cebrián. El profesor de Música y componente de la Banda Municipal don Manuel Mata Padilla fue el generoso donante de las citadas partituras. Además, el patrimonio de la cofradía se incrementó con un sello de correos basado en la evocadora placa que, en 1943, obtuvo el ilustre fotógrafo jiennense don Jaime Roselló. A doña Pilar Quesada Monereo debemos tan valiosa aportación. Cerramos estas felices líneas recordando la donación de un pañuelo y uns manguitos de encaje bordado para María Santísima de los Dolores, gracias a la generosidad de doña Emilia Martínez Jiménez.

 

 

Por último, y dada la importancia de su desarrollo, es de justicia detallar la actividad formativa puesta en marcha durante el pasado curso cofrade, con interesantísimas conferencias, impulsadas desde la vocalía de Formación, bajo la batuta de su titular, nuestra hermana doña Mercedes Palacios. Nuestro capellán ocupó el atril en el inmueble de Vocalías en febrero, con dos charlas de preparación para el misterio de la Pasión, Muerte y Resurrección de Jesucristo; con su habitual elocuencia y su apasionado y poético verbo, don Antonio Aranda dispuso nuestro ánimo para vivir en plenitud los días de la Semana Santa; en marzo, los acólitos de nuestra hermandad recibieron conocimientos teórico prácticos a cargo de don Kiko Jiménez Serrano, complementados días después, en el Camarín de Jesús, con las indicaciones del administrador de la cofradía, don Manuel Escudero Escabias. El 11 de marzo, aquellos que, en breve, adquirirían la condición de pleno derecho fueron ilustrados a través de una charla preparatoria, y cinco días después la fisioterapeuta y promitente doña María Dolores Martínez Roldán expuso, en la conferencia “El trabajo del promitente”, valiosísimos puntos de alto valor para quienes cumplen promesa poniendo sus hombros y su energía al servicio de su devoción. Ya en abril, el delegado diocesano de Liturgia, don Manuel Carmona García, nos enseñó a “Vivir con la Iglesia el tránsito de Jesús a la gloria en la cruz”; rozando el verano, nuestro hermano don Antonio Martínez Luque dio rienda suelta a su experiencia cristiana y compartió con nosotros “El consuelo de la fe”. Tras el paréntesis estival, la actividad formativa fue retomada a través de una charla sobre “La violencia de género, una realidad por y para conocer”, que tuvo a la abogada Maribel Montoro; al agente de la Policía Local perteneciente al grupo Alba de violencia de género del Excelentísimo Ayuntamiento de Jaén don Juan Francisco Lendínez y a nuestra vocal de Formación, doña Mercedes Palacios, como solventes protagonistas.

 

 

Al cerrar esta memoria, que como es habitual se incluirá para su difusión en la página web, invitamos a nuestros hermanos a que cada uno, desde sus posibilidades, se haga partícipe y actor, pues solo con la ayuda y la aportación de todos podremos enriquecer este querido y entrañable proyecto nazareno que pese a los avatares de los hombres y los tiempos, supera ya los cuatro siglos de vigencia.